Algunos momentos, lugares y prácticas pueden aumentar el riesgo de tortura y malos tratos. Ciertos grupos de personas también pueden encontrarse en una situación de vulnerabilidad mayor cuando están privadas de libertad.
Nuestro trabajo responde a los riesgos y a las causas de la tortura. Intervenimos allí donde podemos marcar mayor diferencia, basándonos en pruebas y en colaboración con otras contrapartes.
Trabajamos a escala mundial y en países prioritarios de todas las regiones, dónde desarrollamos y aplicamos enfoques holísticos para la prevención de la tortura.
Sistemas de justicia penal justos
Nos centramos en la reforma de los sistemas de justicia penal, promoviendo la aplicación de salvaguardias para reducir los riesgos de tortura durante las primeras horas de detención y sustituyendo los interrogatorios por entrevistas efectivas.
Personas en situación de vulnerabilidad
Nos centramos en integrar la protección de las personas detenidas en situación de vulnerabilidad, que se enfrentan a mayores riesgos de tortura y malos tratos.
Monitoreo de los lugares de privación de libertad
Nos centramos en reforzar la supervisión independiente para crear mecanismos de monitoreo más eficaces y aumentar la transparencia de todos los lugares en los que hay personas privadas de libertad.
