Desde el comienzo de la pandemia, los riesgos a los que se enfrentan las personas privadas de libertad y el personal de los lugares de detención son especialmente preocupantes. Es posible que las condiciones y el tratamiento de las personas recluidas en instituciones psiquiátricas hayan recibido menos atención pública, pero, no obstante, han ocupado un lugar destacado en el programa de las instituciones de monitoreo.
En junio de 2020, a petición de muchos Mecanismos Nacionales de Prevención (MNP) y otras instituciones de supervisión, la APT facilitó un seminario web para examinar los problemas específicos y las buenas prácticas del monitoreo de las instituciones psiquiátricas durante la pandemia de la COVID-19. Su objetivo era identificar y examinar los principales riesgos que planteaba la COVID-19 en las condiciones y el tratamiento de las personas encerradas en instituciones psiquiátricas, y las soluciones de mitigación que pueden recomendarse eficazmente a ese respecto.
La APT invitó a una ONG asociada, Validity, a compartir su análisis de la situación con aproximadamente 60 monitores de detención de todas las regiones del mundo. Steven Allen, codirector de Validity, destacó la importancia de promover, proteger y defender los derechos humanos de las personas con discapacidades mentales y psicosociales. "Se necesitan visitas de monitoreo de los Mecanismos Nacionales de Prevención (MNP) e investigación estratégica de litigios en las instituciones psiquiátricas durante la pandemia de la COVID-19, para comprender mejor su impacto tanto en el personal como en los pacientes" - dijo Allen.
En las instituciones psiquiátricas, hay personas detenidas voluntariamente o involuntariamente, lo que determina la legalidad o ilegalidad de las medidas de detención. Hay poca supervisión sobre los procedimientos que discriminan a las personas en estas instituciones. Según Allen, en los entornos residenciales deben aplicarse tanto las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre COVID-19, como las medidas básicas de mitigación. "El cierre de estas instalaciones perjudica la reintegración de las personas en la comunidad, porque no pueden mantener relaciones sociales ni familiares in situ" - concluyó.
Los MNP de Brasil, Túnez y el Reino Unido compartieron sus ideas con otros MNP. Las instituciones de monitoreo examinaron los problemas que plantea actualmente la pandemia de la COVID-19 en las instituciones psiquiátricas, como el acceso a la atención de la salud general por parte de las personas internadas en esos centros, la capacitación y el fomento de la capacidad del personal y la cuarentena en régimen de incomunicación. La mayoría de los APN llevan a cabo una vigilancia a distancia de esas instalaciones y muchos de ellos han reanudado las visitas en persona. Los participantes compartieron los problemas metodológicos y las buenas prácticas relacionadas con el monitoreo de las instituciones psiquiátricas, incluido el equipo de protección personal (EPP) para realizar las visitas presencialmente; la importancia de ponerse en contacto con el personal y las autoridades, las familias y el personal médico; el acceso a los registros y cuestionarios electrónicos proporcionados a los pacientes; y los riesgos de represalias. En algunos países, los MNP también están formulando recomendaciones normativas fundamentales para promover alternativas al internamiento institucional de las personas con discapacidades psicosociales.
"Las autoridades locales deben comprender las condiciones en las que viven las personas de estas instituciones", declaró el Sr. Daniel Caldeira de Melo, psicólogo experto del MNP de Brasil. En las instituciones psiquiátricas tunecinas sólo se realizan pruebas en caso de duda y, en muchos casos, el personal tiene que comprar su propio EPP. "El MNP reúne datos, envía cartas a las autoridades solicitando investigaciones y escribe informes mensuales", dijo la Sra. Saida Mbarek, Presidenta de la Comisión de Grupos Vulnerables del MNP de Túnez. En el Reino Unido se ha aplicado el principio de "no hacer daño". "Debido a que las visitas de monitoreo a las instituciones psiquiátricas se suspendieron, el MNP las supervisa virtualmente. Sin embargo, el monitoreo a distancia nos plantea dilemas éticos", añadió el Sr. Mat Kinton, Asesor de políticas de la Ley Nacional de Salud Mental de la Comisión de Calidad de la Atención, del MNP del Reino Unido, Care Quality Commission.
Los Mecanismos Nacionales de Prevención (MNP) juegan un papel crucial en el monitoreo de las instituciones psiquiátricas, aún más en tiempos de la COVID-19. La creatividad en la forma en que las supervisan es positiva porque les permite encontrar alternativas al monitoreo físico. En su discurso de clausura, Barbara Bernath, Secretaria General de la APT, reflexionó sobre los desafíos y oportunidades que enfrentaron las instituciones psiquiátricas durante la pandemia de la COVID-19: "debemos tratar de extraer lo mejor de esta crisis: trabajar juntos en la forma de hacer el monitoreo y aprender de las prácticas implementadas por los diferentes MNP".