La APT expresa su grave preocupación por el retroceso que representaría en el campo de la protección de los derechos humanos y la prevención de la tortura y otros malos tratos la aprobación de la enmienda constitucional que tramita actualmente en la Cámara de Representantes para rebajar la edad de responsabilidad penal en Brasil de los 18 a los 16 años de edad.
En dos notas públicas, la APT se suma al reclamo de organizaciones de la sociedad civil en América Latina y mecanismos de prevención de la tortura para que la Cámara de Diputados rechace dicha iniciativa.
Más información en portugués.