La APT felicita el lanzamiento, el 18 de septiembre, de una iniciativa global para terminar con la comercialización de bienes utilizados para llevar a cabo de tortura y la pena de muerte. Lanzada por la Unión Europea, Argentina y Mongolia, la Alianza cuenta actualmente con 58 países - la mayoría de ellos siendo parte del OPCAT. Los Estados de la Alianza están determinados en tomar medidas efectivas para restringir la comercialización de bienes destinados para el uso de la tortura y malos tratos, incluyendo a través de legislaciones, aplicación efectiva y cooperación reforzada.
“Damos la bienvenida a este paso muy importante”,
“No solamente porque la tortura destruye la integridad física y moral de las propias víctimas y de la sociedad entera, sino también porque es inefectiva y contraproducente”.En su declaración política, los Estados condenaron el uso, así como la producción, comercialización, exportación e importación de bienes que no tiene otro uso práctico sino el de ejecutar la pena capital, y ejercer actos de tortura y otros malos tratos. Reconociendo que la disponibilidad de estos bienes permite estas prácticas, resolvieron en “actuar juntos y juntas para prevenir, restringir y finalizar la comercialización de [determinados bienes],” “comprometerse al fortalecimiento de la cooperación en esta área,” y “comprometerse para poner a disposición la asistencia técnica para el diseño y la implementación de legislación relevante”.
La Alianza para el Comercio Libre de Tortura es un esfuerzo global realizado por países de todo el mundo para detener el comercio de bienes utilizados para realizar actos de tortura y la pena de muerte. Mientras que el derecho internacional prohíbe la tortura en cualquier circunstancia, dichas herramientas aún siguen siendo comercializadas alrededor del mundo, incluyendo empulgueras, esposas para pies de acero, bastones con puntas de metal, cinturones o esposas eléctricos y otros objetos. Oficialmente anunciado el 7 de septiembre, la Alianza fue oficialmente lanzada durante la semana de la Asamblea General en Nueva York.