El pasado 9 de diciembre, la Doctora chilena Paz Rojas Baeza, miembro del Consejo Consultivo de la APT, recibió, de manos de la alcaldesa de la municipalidad de Providencia (Santiago de Chile), la Medalla Municipal de Derechos Humanos Harald Edelstam.
Este premio, entregado por primera vez en homenaje al legado del ex embajador sueco en Chile, Harald Edelstam, honra la trayectoria de una persona destacada en la defensa de los derechos humanos. Es un reconocimiento de la incansable labor y compromiso de Paz Rojas en la lucha contra la tortura y sus secuelas desde los primeros días de la dictadura del General Pinochet en septiembre de 1973.
Desde los años 80, Paz Rojas ha contribuido enormemente a desarrollar lo que hoy es la APT, en apoyo a Jean-Jacques Gautier, como miembro de la Junta Directiva y del Consejo Consultivo de la APT. Sigue siendo hoy una fuente de inspiración permanente para el trabajo de la APT.
Médico especializada en neuro-psiquiatría, ha dedicado su vida a atender a los sobrevivientes de tortura, los familiares de personas desaparecidas o ejecutadas durante la dictadura de Pinochet, incluyendo durante sus años de exilio en París entre 1974 y 1981. A su regreso a Chile, Paz Rojas se integró a CODEPU, una organización de defensa de los derechos humanos que ha presidido durante numerosos años, y desde la cual brindó asistencia médica, psicoterapéutica, social y jurídica a las víctimas de violaciones de derechos humanos. En 1998, obtuvo el Premio de Derechos Humanos de la Universidad de Oslo.
Hoy en día, Paz Rojas continúa luchando para la erradicación de la tortura en Chile. Su libro “Tortura y Resistencia en Chile”, escrito en el exilio junto con dos mujeres médicos refugiadas como ella en Francia, y publicado inicialmente en 1991, fue reeditado en 2013. En un período en que el uso de la tortura tiende a recrudecerse, este fundamental testimonio contra el olvido es de lectura indispensable, para prevenir la repetición de tales actos.