La Oficina de América Latina de la Asociación para la Prevención de la Tortura (APT-AL), con motivo del Día Internacional en Apoyo a las Víctimas de Tortura, quiere brindar un homenaje especial y expresar su solidaridad a las víctimas de tortura y tratos crueles inhumanos y degradantes.La APT-AL recuerda que la prohibición de la tortura es absoluta y que, de acuerdo a la Convención contra la Tortura de las Naciones Unidas, los Estados Parte están obligados a prevenir la tortura y llevar a cabo investigaciones prontas e imparciales, garantizando a las víctimas adecuadas reparaciones e indemnizaciones.
A más de veinte años de la entrada en vigor de esta convención, la APT-AL manifiesta su profunda preocupación ante la situación de los centros de privación de libertad de la región, en donde continúan registrándose actos de tortura y tratos crueles inhumanos y degradantes, elevados índices de violencia carcelaria y hacinamiento, falta de control efectivo de las autoridades, deficientes condiciones de reclusión, uso excesivo de la detención preventiva y corrupción penitenciaria, entre otras, según señala el reciente informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.Ante esta atroz realidad, la APT-AL insta a los Estados a prevenir tales situaciones apoyándose en los instrumentos internacionales disponibles y, en particular, en el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes de la ONU, tratado que establece un sistema de visitas regulares a los centros de privación de libertad, con el objetivo de identificar factores de riesgo que provocan la tortura y formular soluciones encaminadas a mitigarlos. Bajo este sistema, las visitas son llevadas a cabo por un órgano internacional, el Subcomité para la Prevención de la Tortura y otro nacional, el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP).En una fecha tan significativa, la APT-AL aprovecha para recordar a los Estados Parte de este Protocolo su obligación de establecer MNP efectivos e independientes a más tardar un año después de su ratificación, e insta al resto de los Estados de la región que aún no son parte de este instrumento, a ratificarlo e implementarlo, como muestra no solo de su compromiso en la lucha contra la tortura sino también de su responsabilidad para con las víctimas y sus familiares. En la actualidad existen, a nivel mundial, 63 Estados Parte del Protocolo Facultativo, de los cuales 42 han designado sus Mecanismos Nacionales de Prevención. En América Latina, 14 países han ratificado el Protocolo Facultativo, de estos, 9 han designado sus MNP, sin embargo, solo 3 de ellos están operando.La APT es una organización no gubernamental con sede en Ginebra, Suiza, que desde hace más de tres décadas se ha enfocado en la labor de promover la prevención de la tortura a nivel mundial. En abril del 2010, la APT abrió su Oficina Regional para América Latina, situada en la Ciudad de Panamá. Ciudad de Panamá, 26 de junio del 2012